Meru

“Ya estás en casa, Viejo Amigo.
Esta vez es a ti a quien le darán abrigo y te llenarán de todas esas
caricias que tiempo atrás hiciste tú a todos esos niños que corretea
ban junto a ti.
Cuenta tu historia a todas aquellas personas que se detengan a
contemplar toda esa belleza que tienes tatuada en tu alma, Meru.
Te ganarás sus respetos, como ya hiciste antes cuando eras ese árbol
majestuoso que parecía acariciar el cielo con su gran copa.
Enseña la gran verdad que tienes impregnada de que con caricias
y respeto se le puede devolver la vida a aquello que estaba muerto.”